A nadie le gusta que le vendan ni vender, pero más que nunca hoy estamos conscientes de la existencia y la relevancia que tiene nuestra presencia en la mente de las personas, igual que nuestra imagen en la vida online. Por esto, todo emprendedor, empresario o cualquiera que quiera ser reconocido en su industria, necesita una marca personal.
Cuando pensamos en nuestras aspiraciones y metas la mayoría de las veces pensamos a futuro, pero la realidad es que esas ideas a las que les llamamos sueños se están materializando día con día en nuestra cotidianidad. Construimos nuestro futuro en nuestras acciones, nuestros proyectos, lo que posteamos en redes sociales, las personas con las que convivimos y lo que leemos; por eso para llegar a nuestros sueños no podemos dar por hecho nuestro presente.
En este artículo te voy a explicar cómo construir una marca personal que te ayude a que las personas te vean encaminándote a tus sueños y a lograr tus metas.
Está en la constancia y la perseverancia, estar en el momento y con las personas adecuadas, lo que te llevará a lograr tus metas si las tienes bien enfocadas.
Recuerda que mientras más le enseñes al mundo lo que quieres ser y a lo que quieres llegar, más conectarás con personas con tus mismos intereses y eso te llevará a conseguir lo que quieres junto con ellas.
1.- Para crear una marca personal sólida
Lo primero, por más espiritual o metafísico que pueda sonar, es conocerte a ti mismo. Hazte preguntas sobre tu propósito y analiza a dónde quieres llegar con eso. Entendiende para qué eres bueno y lo que te gusta, esto te encaminará en una dirección. En cualquier caso, entender cuál es el destino es la mejor forma de seguir avanzando. El peor error que puedes cometer es hacer algo sin pasión, para eso tienes que cuestionarte lo que quieres lograr a partir de quién eres y perderle el miedo a la autenticidad.
2.- Entiende a quién te vas a dirigir, quién te necesita y para quiénes eres relevante
Después de haber entendido el destino planteado según tu historia, gustos y tu propósito, plantea el camino y los pequeños pasos que te van a llevar a esa gran meta. Este camino está en quiénes te van a ayudar a llegar al destino, pero más que eso, es entender a quiénes vas a ayudar tú y que, por hacerlo, el objetivo que te planteaste esté más cerca.
3.- Quién eres a los ojos de tu audiencia no debe ser una casualidad
Esa percepción es algo que puedes plantear a partir de tu historia. Igual que las marcas, las personas tienen historia y para contar la tuya como marca personal, tienes que elegir qué de tu vida privada se mantendrá en privado y qué compartirás que se alinee con tus objetivos y te ayude a conectar con personas como tú, con autenticidad y siendo real, dando un poco de ti, con imperfecciones y con profundidad, dándole sentido a lo que eres y a tu camino.
Un ejemplo de objetivo o meta puede ser: ayudar a siete mil familias en la Ciudad de México a hacer felices a sus hijos con un estilo de vida saludable y una educación dinámica. Este objetivo habla de una cantidad de personas que se verán beneficiadas alrededor de mejorar el estilo de vida de sus hijos, el target es la respuesta para lograr el objetivo. Todo está en entender a estas personas y conectar con ellas alrededor de sus necesidades.
Tus metas pueden ser mayores o menores a lo que planteamos como ejemplo, pero esta no es realmente la cuestión, si tú eres la cara de una marca, el fundador de un negocio o hasta si trabajas para alguien más y quieres ser reconocido por lo que has hecho y lo que quieres ser, tienes que pensar en quiénes son las personas relevantes para ti.
4.- Se parte de lo que es relevante para tu audiencia
Lo importante no es tener, la importancia cae en ser. La cultura del tener ha evolucionado y cuando pensamos en nuestro consumidor potencial lo importante no es tener más clientes, sino ser parte de su vida cotidiana y entender de qué forma eres relevante para ellos, aportar, dar valor y volverte un pilar relevante para un aspecto de su vida.
Personas como Steve Jobs, Chiara Ferragni o Michelle Obama, entendieron bien lo que una marca personal puede beneficiar a todo lo que te propongas, desde tu reputación hasta tu negocio se puede ver afectado positiva o negativamente por lo que la gente diga de ti y eso es tu marca personal.
5.- Plantea tus medios de comunicación y sus objetivos
Tienes que elegir bien los canales y la forma en la que vas a hablar, pero más que nada tienes que elegir tu mensaje: qué se verá reflejado en tu comunicación a partir de lo que eres y lo que quieres llegar a ser.
Para hacer que las personas hablen de ti, tienes que estar presente, comunicar quién eres te ayudará a forjar una identidad en la cabeza de los demás evitando que ellos mismos creen suposiciones.
Ejemplo aplicado de una marca personal
Voy a poner de ejemplo a mi marca personal, Andy Caraza, que tiene como objetivo posicionarme como mercadóloga, maestra en emprendimiento y negocios, así como la persona que te va a ayudar a impulsar tu startup y escalarla. Para esto utlilizo diferentes medios y reflejo mi propósito que es ayudar a crecer los mejores negocios ayudado a emprendedores apasionados.
Como estrategia de comunicación utilizo Tiktok para llegar a la mayor cantidad de personas posibles y las canalizo a instagram, que es donde conecto con las personas de una forma más personal. Por otro lado tengo mi página web, que es donde pueden encontrar cómo contactarse conmigo y en donde doy mayor credibilidad; con reviews, ejemplos de mis proyectos y una biografía más amplia que explica lo que hago.
Pronto voy a expandir mis medios y empezar tanto un podcast y un canal de YouTube que me ayude a explicar temas más amplios sobre emprendimiento y negocios y ayudar a todavía a más personas. Tendré productos digitales y cursos en linea para que el conocimiento no se quede en los videos que subo a tiktok, sino que las personas puedan llegar más profundo y aplicar estos conocimientos, ayudandome a lograr mi propósito.
La razón por la que hago esto, es por lo que contagian los emprendedores y el amor que le ponen a sus ideas, eso me inspira y me impulsa a seguir aprendiendo.
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Créditos de fotografía: Soledad Ortiz Monasterio.
