Diariamente más de mil aplicaciones se añaden a las tiendas de Google y de Apple principalmente en los rubros de Juegos, Negocios y Educación; con toda esa competencia Google realizó una encuesta para saber qué es lo que lleva a una persona a deshacerse de una aplicación de su dispositivo móvil.
Entre los resultados que arrojó el estudio se muestran elementos que pueden parecer obvios como el hecho de que durante el primer mes de descarga en cuando la mayor parte de la gente se deshace de una app, entre más tiempo pase las posibilidades disminuyen.
Algunas condiciones para que los usuarios la desechen son por la capacidad de almacenamiento que ocupa, la publicidad intrusiva, congelación de la app, intrusión en la privacidad, diseño pobre o difícil de usar, registro complejo, y por supuesto, la falta de uso, lo aburrida que pueda ser o el tiempo que consume.
Las razones para que la mayoría de los usuarios desinstalen una aplicación relacionada con juegos y entretenimiento se relacionan con no disfrutarla, o por tener mucha publicidad o incluir notificaciones intrusivas. Estos datos hay que tomarlos en cuenta al momento de realizarlas pues si bien la publicidad es una forma de generar ingresos, hay que ponderar hasta qué punto o cómo incluirla sin dejar de ser molesta para quien vaya a utilizarla. También el ser aburridas, consumir mucha batería o crear una adicción.
Las aplicaciones de negocios se desechan porque los usuarios encuentran otras con mejor calidad, por dar una pobre experiencia al usuario o por tener que pagar extra por características necesarias o porque tienen errores gramaticales o de redacción.
Si las aplicaciones de educación dejan de ser interesantes los usuarios las desinstalan, también si no procuran enganchar y si hay mejores alternativas, y al igual que en las apps de negocios, pierden credibilidad si tienen errores en su redacción.
Si antes de comenzar a pensar en utilizar una app la idea se enfoca en que no suceda uno de estos motivos, el objetivo de ser usada quienes la descargan, se puede convertir en realidad y la inversión en tiempo y dinero habrá sido bien aprovechada. Para que una app sobreviva hay debe ser útil y, además, agradar al usuario final.