Por: Jorge Osuna y Héctor Garza de Trayecto Zenit
Mientras jugábamos en los Borregos del Tec, nuestro coach siempre fue considerado como un gran motivador; no solo por hablar bonito y dar speeches emotivos, sino porque empoderaba e inspiraba a sus jugadores.
El proceso de empoderamiento que utilizaba se puede describir a través de un modelo llamado PROCEC.
El proceso de un PROCEC de juego
Nuestro coach estudiaba al equipo contrario, analizaba sus tendencias y elaboraba un plan de juego para atacar la defensiva opuesta en las áreas que percibía eran las más débiles.
Además de explotar las debilidades del contrario, sino que hacía uso al máximo de las habilidades de sus jugadores.
Si notaba, por ejemplo, que en cierta formación el jugador más lento del otro equipo tenía que cubrir al más rápido del nuestro, aprovechaba para crear una situación favorable para nosotros por medio de una jugada adecuada.
La motivación ocurría cuando se aseguraba de decírselo a nuestro jugador.
Durante la semana de entrenamiento previo se practicaba esa jugada y le decía a la persona cuyas habilidades se destacarán exactamente qué era lo que se esperaba de él.
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Esa persona se sentía empoderada, incluida en la estrategia, por lo que practicaba hasta tener la confianza de tenerlo dominado. Cuando llegaba el momento de ejecutarlo era capaz de generar el resultado esperado, haciéndolo sentir contribuyente importante de la victoria, listo para hacerlo de nuevo en el siguiente juego.
En el trabajo que hacemos con las empresas con las que colaboramos seguimos un modelo de motivación, transformación y empoderamiento al que llamamos PROCEC, el cual consta de cuatro elementos: propósito, competencias y valores, elección y comunidad.
El modelo PROCEC está ejemplificado a la perfección en la forma en la que motiva, empodera e inspira un buen coach deportivo a sus jugadores.
Este mismo modelo o uno similar puede servirte para mantener a tu gente motivada y para generarle sentido a lo que hacen en el día a día:
Entender el propósito
El primer paso es asegurarte de que los colaboradores entiendan el propósito de cada cosa que les pides, como nuestro coach que se aseguraba de que entendiéramos para qué y por qué mandaba cada jugada y así, al ejecutarla, estuviéramos alineados con lo que queríamos lograr.
Desarrollo de habilidades
De la misma manera que cuando entrenábamos las jugadas una y otra vez hasta perfeccionarlas para generar confianza a la hora de ejecutarlas, tú te puedes asegurar de que la gente a tu cargo desarrolle las competencias, aptitudes y valores necesarios para ejecutar las tareas que le pides.
Es importante enseñar, reforzar, corregir y reconocer cuando sea necesario para generar la confianza necesaria para llevar las tareas a cabo.
Toma de decisión
Aún cuando la disciplina es un factor importante para que cualquier equipo funcione de forma adecuada, también es de valor que las personas del equipo sientan la capacidad y libertad de usar su propio criterio en ciertas etapas de la toma de decisiones.
El poder de elegir es un factor importantísimo para generar engagement. Dentro de las jugadas que teníamos en Borregos siempre había un factor de lectura y elección que nos empoderaba a tomar nuestras propias decisiones al ejecutar las jugadas.
Ser parte de una comunidad
Del modelo PROCEC el elemento cuya presencia es más evidente en un buen líder de equipo deportivo es el ultimo: comunidad.
Con nuestro coach, TODO era acerca del equipo: lo que era mejor para el equipo, la forma en la que el trabajo del individuo fortalecía al equipo. Cuando alguien cumplía con su trabajo era reconocido por el resto. Esto generaba un profundo sentido de pertenencia y apoyo que nos mantenía motivados e inspirados a dar lo mejor de nosotros.
Cuando una persona de tu organización es capaz de tener esa perspectiva amplia acerca de su trabajo se siente como parte de algo más grande, eso logra satisfacer una necesidad básica del ser humano a un nivel fundamental.
Nuestro coach en Borregos era, sin duda, un gran motivador, pero esa cualidad es solo una parte de darle a los miembros de una organización ese salario emocional tan importante para mantenerlos contentos e involucrados con tu organización. Es necesario también empoderar e inspirar.
El modelo PROCEC puede ser una herramienta fructífera para tener a tu equipo en un estado ideal para poder generar resultados extraordinarios.
