Parece sencillo decir que generar ingresos a través del negocio inmobiliario se da ya sea comprando, vendiendo o rentando propiedades. Y, aunque ultimadamente esos ingresos representan el resultado final donde se ven las ganancias líquidas, hay mucho trabajo tras bambalinas para lograrlo.
Una parte de ese trabajo es el marketing inmobiliario. Actualmente, no basta que tu propiedad o desarrollo esté en buenas condiciones. La oferta es tanta que, además de destacar características, hay que encontrar maneras de resaltarlas y enamorar al cliente: conectar con el público, crear una identidad que convoque a formar comunidad, a que la gente quiera participar y formar parte de un entorno.
Otro punto importante por atacar es hacer alcanzable el producto que se ofrece. Los precios de los inmuebles se han ido ajustando a plusvalías, costos e inflaciones, lo que a un sector del público representa una brecha cada vez más amplia.
Para esto se ofrecen enganches de bajos porcentajes y mensualidades accesibles para ir amortizando la deuda total; incluso comercializar otras herramientas de inversión como los certificados de participación inmobiliaria, que permiten invertir montos menores y obtener rendimientos atractivos.
Básicamente, sacar a la gente de ese mindset de que no les alcanza y lograr sinergia entre los participantes del negocio inmobiliario.
Si empleas una técnica de marketing efectiva, tu proyecto puede ser caso de éxito, permitiéndote generar utilidades e incluso replicar en futuros proyectos.
Este rubro es uno en el que vale la pena invertir, para que tu experiencia sea la más positiva y participes en la evolución de la ciudad.
ALGUNAS HERRAMIENTAS DIGITALES PARA EL MARKETING INMOBILIARIO
– Videos: apoyos visuales que dan tangibilidad a algo que está en proceso de construcción o remodelación, como recorridos virtuales o registros de avance de obra grabados con drones.
– Redes sociales: una de las maneras más efectivas para causar un impacto en clientes potenciales, mientras se use sabiamente. Contamos con historias de Facebook e Instagram, Snapchat, Facebook Live, etc. Aquí toma más valor el empuje de la venta indirecta: posicionamiento de marca, comunicación con el cliente a través de artículos, datos de interés general y esporádicamente incluir información de venta de tu producto.
– Landing page: página de internet sencilla pero con información básica y relevante sobre lo que estás vendiendo
y medios de contacto. En estas siempre hay que considerar la adaptación a smartphones, ya que hay más probabilidad de que sea vista desde uno de estos dispositivos.
POR GERARDO GALVÁN. Legant Real State.
